La felicidad de tu empleado importa, y mucho

¿A quién le gusta levantarse e ir a trabajar? Porcentualmente, seguro que a muy pocos. Más que nada porque no solemos encontrar la felicidad en el trabajo. Y esto afecta profundamente a la productividad de los empleados.

Según un estudio de Gallup, en España el tener trabajadores poco contentos supone una pérdida aproximada de unos 7.000 millones de euros al año. No es un dato a desdeñar, dado que más de la mitad de la población española no se siente feliz en su empleo actual. Y eso redunda en una pérdida del 20% de la eficiencia.

Conseguir que tus trabajadores lo hagan más a gusto se puede lograr de varias formas. Por ejemplo, aplicando una gestión correcta de los horarios y las horas extra. Que nadie haga muchas mientras otros hacen pocas, que estén bien remuneradas…

Para esto, por ejemplo, se pueden usar herramientas como Efectivus, que permite una gestión completa de tus trabajadores y sus horarios. De esta forma aumentaremos el bienestar de la plantilla y por lo tanto trabajarán mejor.

Por otra parte, es importante saber depurar las responsabilidades. No podemos culpar de todo a los jefes, aunque sí que son los que mejor pueden hacer que mejore el clima laboral. Y ojo, que no todo es formar y hacer cosas: la felicidad se contagia. Si el jefe es feliz, los trabajadores tendrán más facilidades para serlo.

La felicidad, factor clave para ser productivo

Aún estamos lejos de una correcta gestión de personal. De hecho, ni el 11% de los trabajadores (según una encuesta de Adecco) considera que las empresas toman medidas relacionadas con mejorar la felicidad de sus empleados. Y muchos consideran que es algo fundamental.

No es un tema complicado. Sabiendo gestionar bien los horarios y conociendo al personal y aplicando algunas medidas que en muchos casos son hasta gratuitas o tremendamente baratas (una mesa de pingpong es barata, por ejemplo). Otra forma muy práctica es colocando a un encargado o supervisor que aprecie y sea apreciado por su equipo.

Por lo tanto, ¿es la felicidad del trabajador importante? Por supuesto, a los datos nos remitimos. Un trabajador contento es más eficiente y se entrega más por la empresa. Podemos y debemos destinar recursos y herramientas a la felicidad. Porque al final del día lo que nos gusta es pensar que somos felices.